Si hay una palabra
para definir este disco, la palabra es “celestial”.
Sinatra trae por
primera vez a Don Costa, que hasta entonces había trabajado con artistas como
Paul Anka, y le pide que escriba arreglos de cuerdas suntuosos y etéreos. Ahora
Frank quiere ser un crooner de lujo, un vocalista que cante esas canciones que
sirven para mirar las estrellas y soñar.
El fruto de esa
colaboración es este álbum espléndido, exuberante, donde Frank, más que cantar
las canciones, las borda.
Lo mejor es la
contundente versión de “Come Rain Or Come Shine”, en el que Sinatra y Costa
bajan un poquito de las nubes para ponerle calor jazzero al asunto; los
arreglos de Costa alcanzan la excelencia; y Frank, bueno… qué se puede decir
del tipo a estas alturas. Sofisticado, elegante, varonil, personal,
incomparable.
O como él solía
decir: “O tienes clase, o no la tienes”.
Van de regalo dos
promos radiales que van a volver loquitos a los coleccionistas de rarezas.
1. I Hadn't Anyone
Till You
2. Night and
Day
3. Misty
4. Stardust
5. Come Rain or
Come Shine
6. It Might as Well
Be Spring
7. Prisoner of
Love
8. That's All
9. All or Nothing
at All
10. Yesterdays
11. As You Desire
Me
12. Don't Take Your
Love from Me
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